Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Esta semana, el sur y el este de Europa se encuentran enfrentando una ola de calor excepcional que ha llevado a los servicios meteorológicos nacionales a emitir advertencias y avisos por temperaturas extremadamente altas, así como alertas por tormentas, inundaciones y vendavales en algunas zonas. Países como Polonia, Ucrania, Grecia, Macedonia del Norte, Bulgaria e Italia están siendo golpeados por este fenómeno climático que está poniendo a prueba la resistencia de sus habitantes y sus sistemas de emergencia. En Polonia, el Instituto de Meteorología ha aconsejado a la población no salir de casa si no es estrictamente necesario ante la previsión de tormentas y temperaturas superiores a los 34 grados. La alarma ha sido decretada en cinco de las 16 provincias del país debido a la combinación de altas temperaturas y la posibilidad de tormentas eléctricas, inundaciones y fuertes vientos que podrían alcanzar los 90 kilómetros por hora. En Ucrania, las temperaturas han superado los 35 grados y se espera que alcancen los 40 en las próximas jornadas, lo que se suma a los apagones programados por las autoridades para enfrentar el déficit de energía causado por los ataques contra su sistema eléctrico. Esta situación deja a muchos ciudadanos sin la posibilidad de utilizar el aire acondicionado en momentos de intenso calor. En Grecia, que ya experimentó un mes de junio récord en cuanto a temperaturas, se están registrando valores superiores a los 40 grados, lo que incrementa el riesgo de incendios forestales debido a los fuertes vientos presentes en diversas ciudades. Un escenario similar se vive en Macedonia del Norte, donde los incendios han llevado al gobierno a solicitar asistencia a países vecinos para hacer frente a la emergencia. Bulgaria, por su parte, ha extendido la alerta de "código rojo" en cuatro regiones por la ola de calor que ha provocado numerosos incendios forestales. En Italia, la situación no es menos grave, con altas temperaturas que han causado la activación de la alerta roja en varias ciudades, incluyendo Roma, donde se han reportado tres muertes como consecuencia del calor extremo. En España, la Agencia de Meteorología ha advertido sobre un episodio de "temperaturas muy altas" con máximas que podrían alcanzar los 42-44 grados en amplias zonas del país en los próximos días. Esta situación pone en alerta a las autoridades y a la población, que deberá tomar medidas para hacer frente a las altas temperaturas y prevenir posibles riesgos para la salud y la seguridad. Ante esta ola de calor sin precedentes en diversas regiones de Europa, es fundamental que se tomen medidas de prevención y se refuercen los sistemas de respuesta ante emergencias para proteger a la población y reducir los impactos negativos en el medio ambiente y la infraestructura. La cooperación regional y la solidaridad entre países serán clave para hacer frente a esta crisis climática y mitigar sus efectos a corto y largo plazo.