Andrew Tate lanza el partido 'BRUV', aspira a ser Primer Ministro del Reino Unido a pesar de las controversias.

La controvertida figura mediática Andrew Tate ha declarado sus intenciones de postularse para Primer Ministro del Reino Unido, presentando lo que él describe como el partido 'BRUV'. El anuncio, realizado a través de una serie de publicaciones en la plataforma de redes sociales X, ha dejado a muchos cuestionando si se trata de un esfuerzo político serio o simplemente de una maniobra. Tate, quien ha estado bajo arresto domiciliario desde agosto en medio de batallas legales en Rumanía relacionadas con graves cargos criminales, no es ajeno a generar titulares. Su reciente proclamación afirma que es el "hombre más famoso de internet", y parece inspirarse en otros influyentes que han logrado una transición exitosa a la política, citando a un YouTuber chipriota que consiguió un escaño en el Parlamento Europeo como precedente. En sus publicaciones, Tate enfatizó un "gran despertar" entre el público y expresó su deseo de interrumpir el panorama político actual, afirmando: "Cosas más extrañas han sucedido". A pesar de sus asertivas afirmaciones, reina el escepticismo, particularmente dado su pasado controvertido que involucra acusaciones de trata de personas y delitos sexuales. Los críticos han recurrido a las redes sociales para expresar sus preocupaciones, con un usuario afirmando de manera contundente: "No puedes postularte para ser Primer Ministro en el Reino Unido, [redactado] idiota", mientras que otro hizo un comentario agudo sobre la complicada historia legal de Tate. Aunque Tate afirma haber establecido un partido político, el partido BRUV no parece estar registrado oficialmente en la Comisión Electoral del Reino Unido. Sin embargo, ha estado promoviendo el partido a través de un sitio web dedicado y una presencia en redes sociales, delineando sus supuestos valores fundamentales que incluyen un compromiso con el orgullo nacional, la reducción del crimen y una lucha contra la corrupción. Las respuestas de figuras políticas han sido en su mayoría despectivas. La diputada laborista Emily Darlington articuló un firme rechazo a la candidatura de Tate, afirmando que los votantes británicos no apoyarán a un "misógino acusado de trata de personas y violación". Además, el candidato satírico Count Binface expresó su disposición a competir contra Tate, recordando su propia victoria sobre el partido de extrema derecha Britain First. A pesar del abrumador escepticismo y la burla tanto del público como de los insiders políticos, el anuncio de Tate ha suscitado conversaciones sobre la naturaleza en evolución de la candidatura política en una época donde la fama en internet puede allanar el camino para una influencia en el mundo real. A medida que el Reino Unido se prepara para su próximo ciclo electoral, la aparición de candidatos no convencionales plantea preguntas sobre el sentimiento de los votantes y la intersección entre la cultura de las celebridades y la política. Si las aspiraciones de Tate ganarán impulso o permanecerán como una nota al pie extraña en el panorama político, está por verse.