La ciudad sagrada de Tíbet sacudida: 95 muertos, cientos de heridos en un devastador terremoto.

Un devastador terremoto de magnitud 7.1 golpeó la ciudad sagrada de Shigatse en Tíbet el martes por la mañana, cobrando la vida de al menos 95 personas e hiriendo a alrededor de 130 más, según informaron los medios estatales chinos. El sismo, que ocurrió a las 9:05 a.m. hora local, fue registrado inicialmente con una magnitud ligeramente inferior de 6.8 por funcionarios chinos, mientras que el Servicio Geológico de EE. UU. confirmó la lectura más alta de 7.1. El epicentro de este catastrófico evento se localizó en el condado de Dingri, un área conocida por su significativa relevancia cultural y espiritual para los budistas tibetanos. El choque sísmico ha causado daños considerables, con más de 1,000 residencias reportadas como dañadas o destruidas, dejando partes de la región en ruinas. Al menos 6,900 residentes viven dentro de un radio de 20 kilómetros del epicentro, y los esfuerzos de rescate en curso han visto un aumento de más de 1,500 bomberos y trabajadores de rescate enviados a las áreas afectadas. Después del sismo inicial, la región experimentó numerosos réplicas, algunas registrando hasta 4.4 de magnitud. Los temblores también se sintieron en países vecinos, incluyendo Nepal, Bután e India, lo que generó una preocupación generalizada sobre la estabilidad del área tras un terremoto de tal magnitud. El Servicio Geológico Británico ha advertido que los residentes podrían enfrentar réplicas adicionales en los próximos meses, como es típico después de un gran terremoto. El portavoz señaló que la frecuencia e intensidad de las réplicas suelen correlacionarse con la fuerza del sismo inicial, lo que podría prolongar el riesgo para quienes viven cerca. Desde el punto de vista sísmico, el terremoto ocurrió a una profundidad de aproximadamente 10 kilómetros bajo la superficie, cerca del límite tectónico entre las placas euroasiática e india, una región conocida por su actividad sísmica. Esta colisión de placas tectónicas ha resultado históricamente en grandes terremotos, incluyendo el terremoto de Gorkha en Nepal en 2015, que resultó en casi 9,000 muertes. El constante movimiento de estas placas tectónicas no solo plantea una amenaza persistente de terremotos, sino que también contribuye al levantamiento geológico del Himalaya, donde el monte Everest se erige como un testimonio del poder de las fuerzas naturales en juego. A medida que la placa india continúa deslizándose por debajo de la placa euroasiática, la dinámica geológica resultante subraya la importancia de la preparación en una región susceptible a tales desastres naturales devastadores. En respuesta a la tragedia, el presidente chino Xi Jinping ha hecho un llamado a "esfuerzos de rescate a gran escala para salvar vidas y minimizar las víctimas", enfatizando la urgencia de la situación. A medida que continúan las operaciones de rescate, el enfoque sigue siendo proporcionar ayuda inmediata a los afectados y evaluar la magnitud total de los daños en esta región históricamente rica pero sísmicamente activa.