Catherine Zeta-Jones y Michael Douglas ponen en venta su mansión por 11 millones

Catherine Zeta-Jones y Michael Douglas han decidido poner en venta su emblemática mansión en Irvington, Nueva York, por la cifra de 11 millones de euros. Este movimiento marca un hito en la vida de la pareja, que ha sido un símbolo de amor y éxito en la industria del entretenimiento desde su matrimonio en el año 2000. Con dos hijos adultos, Dylan y Carys, y un deseo creciente de explorar el mundo, la pareja ha optado por una nueva etapa que parece girar en torno a los viajes, especialmente a Europa y las Bermudas, donde también tienen propiedades. La mansión, conocida como Longmeadow, es una joya arquitectónica construida en 1929. Esta impresionante residencia de estilo georgiano se asienta a orillas del río Hudson, ofreciendo un entorno sereno y pintoresco, a solo 40 kilómetros de la bulliciosa ciudad de Nueva York. Con 12 acres de terreno, la propiedad no solo garantiza privacidad, sino que también proporciona un respiro de la vida urbana, convirtiéndose en un refugio idílico para sus propietarios. Desde que adquirieron Longmeadow en 2019 por 4,5 millones de dólares, Douglas y Zeta-Jones han realizado una serie de reformas para modernizar la casa, mientras que se han esforzado por conservar su carácter histórico. Este enfoque ha permitido que la mansión mantenga su esencia, con detalles arquitectónicos originales que incluyen maderas nobles y chimeneas antiguas, elementos que reflejan la elegancia de su época. Las características internas de la mansión son dignas de admiración. Con una superficie habitable de 1.078 metros cuadrados distribuidos en cuatro plantas, Longmeadow cuenta con ocho amplios dormitorios y diez baños completos, además de dos aseos. Cada rincón de la casa ha sido diseñado para crear un ambiente acogedor y lujoso, que se adapta a la vida familiar y a la recepción de invitados. Entre los espacios más destacados se encuentra un elegante salón con bar, un comedor formal que puede albergar hasta doce comensales, y una cocina completamente renovada, equipada con electrodomésticos de alta gama. Uno de los aspectos más notables de la propiedad es su biblioteca de dos plantas, que está revestida con paneles de roble. Este espacio, que se conecta mediante una majestuosa escalera de caracol, invita a la tranquilidad y la reflexión, proporcionando un ambiente ideal para la lectura o el trabajo. La intención de sus propietarios es clara: crear un hogar que no solo sea un lugar para vivir, sino un refugio de paz y creatividad. La planta inferior ha sido diseñada con un enfoque en el entretenimiento, lo que refleja el estilo de vida de sus residentes. Con un gimnasio completamente equipado, una zona de recreación y una piscina cubierta climatizada, el espacio es perfecto para relajarse y disfrutar de momentos de ocio. Grandes ventanales permiten que la luz natural inunde estas áreas, mientras que las vistas al exterior ofrecen un espectáculo visual constante de la belleza del entorno. La suite principal también destaca por su lujo. Equipado con un área de estar con chimenea, un vestidor y un baño exquisito con bañera de mármol, este espacio está diseñado para ofrecer el máximo confort y privacidad a sus ocupantes. Aquí, cada detalle ha sido cuidadosamente considerado para crear un ambiente de relajación y bienestar. El exterior de Longmeadow es tan impresionante como su interior. Los jardines extensos que rodean la propiedad se extienden hasta las orillas del río Hudson, creando un entorno natural de belleza inigualable. Las zonas de comedor al aire libre son perfectas para disfrutar de cenas bajo las estrellas durante los meses cálidos, mientras que el garaje adjunto, con capacidad para cuatro vehículos, asegura que la comodidad se extienda a todos los aspectos de la vida diaria. La historia de Longmeadow añade un valor adicional a esta propuesta inmobiliaria. Anteriormente perteneció a personalidades de renombre, como Charles Lewis Tiffany, fundador de Tiffany & Co., y ha sido escenario de eventos importantes, incluyendo una recaudación de fondos privada para la campaña de reelección del presidente Joe Biden en 2023. Este legado convierte a la mansión en un lugar lleno de historia y prestigio, ideal para aquellos que buscan no solo una casa, sino un estilo de vida. La venta de Longmeadow representa una oportunidad única en el mercado inmobiliario de lujo. Con un precio de 11 millones de euros, esta propiedad no solo ofrece un hogar, sino también un estilo de vida que combina elegancia, comodidad y exclusividad. La expectativa es que atraiga a compradores que valoren la rica historia y el carácter distintivo que Longmeadow ofrece a sus nuevos propietarios, un espacio que seguramente seguirá siendo apreciado tanto por su belleza como por la historia que lleva consigo.