Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
La reciente actividad de PetroTal en el Lote 95 de Loreto marca un hito significativo en la exploración y producción de hidrocarburos en la región. Desde julio de 2024, la empresa de capitales canadienses ha estado perforando el pozo 20H en el campo Bretaña, un proyecto que ha suscitado expectativas tanto en el ámbito empresarial como en el medioambiental. Esta operación no solo se limita a la explotación de las reservas existentes, sino que también abre la puerta a la evaluación de nuevas formaciones de arena que podrían tener un impacto considerable en la producción futura de la compañía. El pozo 20H está diseñado para realizar pruebas en dos formaciones de arena: la Vivian superior (VS1) y la Vivian principal (VS2). Hasta la fecha, PetroTal ha centrado su atención en la explotación de la arena VS2, que se ha destacado por su mayor permeabilidad. Sin embargo, los datos preliminares del VS1 han revelado un flujo de 320 barriles de petróleo por día durante una prueba breve, lo que sugiere que esta formación podría ser más productiva de lo que se había anticipado. De acuerdo con estimaciones de la consultora Netherland, Sewell and Associates, Inc., el 20% de las reservas probadas y probables en el yacimiento de Bretaña provienen de la arena VS1. Esto plantea una oportunidad para que PetroTal modifique su plan de desarrollo actual y considere la inclusión de esta formación en futuras certificaciones de reservas. La posibilidad de que el pozo VS1 pueda operar con bajos volúmenes de agua también elimina la necesidad de construir nuevas instalaciones para el tratamiento de este recurso, lo que podría repercutir positivamente en los costos operativos. El presidente y director ejecutivo de PetroTal, Manuel Pablo Zúniga-Pflucker, ha enfatizado que la producción desde la arena VS1 podría no solo sumar a las reservas existentes, sino también mejorar la vida útil del pozo. Con una estrategia clara de extender la producción y reducir costos, la empresa parece estar en una posición favorable para fortalecer su presencia en el mercado petrolero peruano. En este contexto, PetroTal ha presentado una modificación del estudio de impacto ambiental detallado (MEIA-d) ante el Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace). Esta solicitud incluye la incorporación de una nueva plataforma de perforación, que implica una inversión aproximada de 260 millones de dólares. La propuesta contempla la perforación de 32 pozos productores y ocho inyectores de agua en la plataforma L2-Sur, así como ocho pozos en la L-2 y otros ocho en la L-2 Oeste. Este ambicioso plan tiene como objetivo incrementar la producción de crudo a 50,000 barriles por día, así como gestionar la producción de agua a 800,000 barriles diarios. La implementación de estas medidas no solo podría aumentar la rentabilidad de la empresa, sino también contribuir a un manejo más eficiente de los recursos hídricos en la zona, un aspecto crítico en un contexto de creciente preocupación ambiental. Desde su inicio en la producción de petróleo en junio de 2018, PetroTal ha mostrado un crecimiento constante y, a principios de 2022, se convirtió en el mayor productor de petróleo crudo en Perú. Este crecimiento ha sido impulsado por una estrategia clara de exploración y producción, que ahora se ve complementada por la posibilidad de diversificar su enfoque hacia nuevas formaciones de arena. Sin embargo, la industria petrolera enfrenta un escrutinio creciente en términos de sostenibilidad y responsabilidad ambiental. Las acciones de PetroTal, especialmente en lo que respecta a la gestión ambiental y a su impacto en las comunidades locales, serán observadas de cerca por los grupos de interés y la sociedad civil. A medida que se desarrollen estos planes, será esencial que PetroTal mantenga una comunicación abierta y transparente con sus accionistas y la población local. La confianza en las operaciones de la empresa no solo depende de los resultados económicos, sino también de su capacidad para operar de manera responsable y sostenible en una de las regiones más biodiversas del planeta.