Juan Brignardello Vela
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La reciente inversión del Leicester City en Bilal El Khannouss, un centrocampista marroquí de 20 años, ha levantado cejas y ha suscitado discusiones entre aficionados y analistas por igual. Tras la venta de Kiernan Dewsbury-Hall al Chelsea, Leicester asignó una parte significativa de su presupuesto de transferencias de verano—aproximadamente una cuarta parte—para asegurar a El Khannouss de Genk. Este movimiento resalta la ambición del club por construir para el futuro, apostando por un jugador con un potencial considerable que puede necesitar tiempo para adaptarse a las exigencias de la Premier League. Con casi 100 apariciones en el fútbol senior en Bélgica y habiendo representado a Marruecos tanto en la Copa del Mundo como en los Juegos Olímpicos, El Khannouss es visto como una perspectiva a largo plazo. Su trayectoria profesional es notable: comenzó su andadura futbolística en la prestigiosa academia del Anderlecht antes de hacer el cambio a Genk, un club conocido por desarrollar talento, habiendo formado a jugadores como Kevin De Bruyne y Christian Benteke. El camino de El Khannouss hacia el fútbol profesional es una historia fascinante. Creció en el suburbio de Strombeek, en Bruselas, perfeccionando sus habilidades en el fútbol callejero antes de llamar la atención de los cazatalentos del Anderlecht a la edad de cinco años. A los 14, decidió mudarse a Genk, creyendo que allí podría acelerar mejor su desarrollo. Su determinación por unirse al Leicester se evidenció en su negativa a entrenar, lo que finalmente facilitó la transferencia tras el rechazo de Genk a ofertas anteriores. Para el Leicester, la pregunta sigue siendo: ¿qué están obteniendo exactamente por su inversión? El Khannouss es reconocido como un pasador progresivo, con métricas avanzadas que indican que sobresale en mover el balón hacia adelante de manera efectiva. Su calificación para el pase progresivo es impresionante, con un 91 de 99, pero hay áreas que mejorar, particularmente en sus capacidades de anotación. Con solo cuatro goles en su carrera, tres de los cuales fueron la temporada pasada, hay una clara necesidad de que mejore sus contribuciones en el tercio ofensivo. El periodista belga Bob Faesen, que cubre al Genk, describe a El Khannouss como un jugador talentoso pero modesto. Su fortaleza radica en su habilidad técnica y en la presión, aunque a veces se retrasa, limitando sus oportunidades de anotación. Faesen señala que, aunque puede que no tenga un récord goleador prolífico en este momento, El Khannouss tiene el potencial para evolucionar hacia un rol más ofensivo, quizás como un No. 8 en lugar de ser solo un No. 10. A pesar de las dudas sobre su capacidad de anotación, El Khannouss cuenta con una fuerte ética de trabajo, rastreando meticulosamente sus métricas de rendimiento e invirtiendo en técnicas de recuperación como la crioterapia. Se inspira en jugadores como De Bruyne, cuya paciencia y posicionamiento estratégico han influido en su estilo de juego. El Khannouss es versátil, se siente cómodo operando en varios roles ofensivos y está ansioso por integrarse en el equipo del Leicester mientras contribuye a sus esfuerzos por recuperar un sólido posicionamiento en la Premier League. El entrenador del Leicester, Steve Cooper, tiene una gran cantidad de opciones en el rol de No. 10, incluyendo jóvenes talentos como Facundo Buonanotte y Michael Golding. Sin embargo, se considera que El Khannouss está más avanzado en su desarrollo, y Cooper espera que su adaptación a la Premier League sea rápida. Las apuestas son altas, ya que el club busca restablecerse en la máxima categoría, y el rendimiento de El Khannouss será crucial en sus ambiciones. En última instancia, aunque hay reservas sobre si está completamente preparado para las exigencias de la Premier League, sus habilidades técnicas, carácter y ambición sugieren que podría tener un impacto significativo en el Leicester. Tanto aficionados como analistas estarán observando de cerca para ver si este prometedor joven centrocampista puede cumplir con las expectativas que conlleva una inversión tan significativa.