Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En un audaz movimiento para reafirmar su presencia en el panorama de la comida rápida, McDonald's ha anunciado una impresionante inversión de £1 mil millones para establecer 200 nuevos restaurantes en el Reino Unido e Irlanda. Esta ambiciosa expansión está destinada a crear más de 24,000 empleos, marcando una contribución significativa al empleo en ambas naciones. Alistair Macrow, director de McDonald's en el Reino Unido e Irlanda, enfatizó que esta iniciativa demuestra el "compromiso continuo" de la empresa con el crecimiento, especialmente en un momento en que la economía enfrenta diversos desafíos. El plan de expansión llega en un momento en que el sector inmobiliario comercial está experimentando un cambio. Según Jonathan DeMello, un experto en bienes raíces comerciales, los precios de alquiler de las unidades en High Street han caído considerablemente en el panorama post-COVID debido a una ola de cierres de restaurantes. "Una gran cantidad de espacio para restaurantes ha regresado al mercado", comentó, indicando un entorno favorable para que McDonald's aproveche los alquileres más bajos. La estrategia de la empresa probablemente incluirá un enfoque en parques comerciales, especialmente en áreas fuera de Londres y otras ciudades del sureste, donde la demanda ha impulsado un aumento en los alquileres. Notablemente, McDonald's también está respondiendo al clima económico actual caracterizado por la caída de las tasas de interés y la aparición de una economía en recuperación. A pesar de la crisis del costo de la vida, el sector de la comida rápida sigue siendo resistente, con los consumidores buscando continuamente opciones de comidas asequibles. Datos de Meaningful Vision revelan que las promociones de comida rápida han aumentado un 33% en comparación con el año anterior, lo que indica un panorama competitivo en el que las empresas se esfuerzan por atraer a clientes conscientes del valor. Sin embargo, esta estrategia ha recibido críticas de expertos en salud preocupados por las implicaciones de fomentar el consumo de comida rápida. El enfoque en el Reino Unido e Irlanda también puede reflejar la respuesta estratégica de McDonald's a los recientes desafíos globales. Con los mercados internacionales enfrentando inestabilidad, particularmente tras las tensiones geopolíticas, la empresa se ha retirado de Rusia tras su invasión de Ucrania. Además, los boicots en Oriente Medio debido a la postura percibida de la empresa durante el conflicto Israel-Gaza han impactado aún más las ventas. Al fortalecer su presencia en el Reino Unido e Irlanda, McDonald's parece estar buscando un punto de apoyo estable en medio de las incertidumbres. Sin embargo, la empresa no está exenta de controversias. McDonald's está abordando actualmente graves acusaciones derivadas de una investigación de la BBC que descubrió más de 100 quejas de empleados sobre una cultura de abuso y acoso sexual dentro de sus filas. Los informes indican que muchas empleadas jóvenes han experimentado tocamientos inapropiados de manera rutinaria. En respuesta a estas acusaciones, McDonald's ha lanzado una investigación interna y ha expresado su compromiso de erradicar comportamientos que contradicen los altos estándares que establece para su fuerza laboral. A medida que McDonald's inicia esta sustancial inversión y expansión, enfrenta un doble desafío: crecer su presencia en un paisaje económico cambiante mientras aborda simultáneamente problemas internos que amenazan su reputación. Los próximos meses revelarán cuán efectivamente la empresa puede navegar por estas complejidades y si su renovado enfoque en el Reino Unido e Irlanda dará los resultados deseados.