Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Una reciente investigación ha puesto en el centro del debate la ingesta de café en personas mayores de 60 años, sugiriendo que el consumo excesivo podría tener un impacto negativo en sus capacidades cognitivas. El estudio, realizado por Helsingin Sanomat, abarcó a 8.451 participantes mayores de 60 años inscritos en el biobanco del Reino Unido, donde se observó una tendencia preocupante en aquellos que consumían más de tres tazas de café al día. Los hallazgos revelaron que los adultos mayores que se exceden en su consumo de café presentan un deterioro significativo en su inteligencia flexible, una habilidad clave para adaptarse a nuevas situaciones y resolver problemas. En contraste, aquellos que mantenían un consumo moderado de café mostraron un descenso perceptiblemente menor en esta capacidad mental. Este resultado subraya la importancia de equilibrar el placer de disfrutar de una taza de café con las posibles repercusiones en la salud cognitiva. La investigadora Kelsey R. Sewell, del Advent Health Research Institute, enfatizó que, si bien el café puede ser beneficioso en cantidades moderadas, "los excesos son malos". Esta afirmación resuena con un conocimiento común en la comunidad científica respecto a la moderación en cualquier hábito alimenticio. Sin embargo, se hace hincapié en que esta investigación es de carácter observacional, lo que significa que se requerirán más estudios para confirmar estos resultados y entender mejor la relación entre el consumo de café y la salud cognitiva en la tercera edad. Paralelamente, es fundamental reconocer los beneficios del café cuando se consume adecuadamente. Según el portal La Tienda del Café, el café negro sin azúcar puede aportar numerosos beneficios para la salud, tales como un aumento en el metabolismo y una mejora en el rendimiento físico. Sin embargo, el consumo de café con azúcar puede contrarrestar estos efectos positivos y, en lugar de eso, contribuir a otros problemas de salud. La cafeína, el principal componente activo del café, no se almacena en el cuerpo y se elimina a través de la orina tras varias horas de su ingesta. Esto plantea la cuestión de cuántas tazas de café son seguras y beneficiosas. Especialistas sugieren que el límite estaría entre 3 y 5 tazas diarias, siempre y cuando no se exceda la ingesta de 400 mg de cafeína. Es un recordatorio de que, como en todo, la moderación es la clave para disfrutar de los beneficios del café sin poner en riesgo la salud. La elección entre café caliente o frío también es un tema de debate. Desde un punto de vista nutricional, el café caliente parece tener una ligera ventaja, ya que mantiene mejor los compuestos bioactivos y polifenoles que ofrecen beneficios para la salud. Sin embargo, el café frío no pierde completamente sus propiedades, lo que significa que los consumidores pueden optar por lo que prefieran sin sacrificar completamente los beneficios. Mitos sobre el café frío han surgido, incluyendo la creencia de que contiene más cafeína que el café caliente. Sin embargo, este mito ha sido desmentido por expertos, quienes explican que el contenido de cafeína está más relacionado con el tipo de café y el método de preparación que con la temperatura a la que se consume la bebida. En resumen, el café sigue siendo una de las bebidas más populares del mundo, y su consumo puede tener tanto efectos positivos como negativos, especialmente en la población mayor. La clave parece estar en la moderación y en la elección de la calidad del producto que se consume. A medida que se continúan realizando investigaciones sobre este tema, es esencial que los adultos mayores y sus cuidadores estén informados sobre las mejores prácticas para disfrutar del café de manera segura y saludable.