Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Las autoridades chinas han intensificado su intervención en el mercado de bonos en respuesta a un creciente malestar por el comportamiento de este sector crítico de la economía. En una medida poco común, los reguladores han instruido a los bancos rurales de Jiangxi a no cumplir con el settlement de recientes operaciones de deuda pública, lo que representa una violación directa de sus obligaciones en el mercado. Esta decisión se enmarca dentro de un conjunto de acciones destinadas a enfriar un inesperado repunte de los rendimientos, que había llevado a las tasas a mínimos históricos. Este movimiento se produce en un contexto de creciente preocupación oficial sobre la exposición de los bancos al riesgo de tasas de interés, algo que ha sido objeto de advertencias desde abril por parte del Banco Popular de China (PBOC). A pesar de estas advertencias, los rendimientos de los bonos continuaron su caída, lo que llevó a las autoridades a enviar un mensaje contundente al mercado sobre su postura respecto a los bonos a largo plazo. Los recientes esfuerzos por controlar el mercado parecen haber tenido un efecto inmediato. Después de alcanzar un mínimo histórico de aproximadamente 2.12% a principios de mes, la tasa de referencia a 10 años ha comenzado a aumentar, situándose actualmente cerca del 2.22%. Sin embargo, este tipo de intervención plantea riesgos significativos: podría disociar al mercado de sus fundamentos económicos y erosionar la confianza de los inversionistas a largo plazo. La experiencia reciente de las autoridades chinas se ve ensombrecida por la memoria de fracasos anteriores en el intento de controlar otros mercados, como el de acciones y divisas. Estos intentos han resultado en consecuencias a menudo caóticas y han llevado a una desconfianza generalizada entre los gestores de fondos internacionales. Los datos más recientes muestran un retiro récord de capital extranjero del país en el segundo trimestre, evidenciando un pesimismo persistente hacia los activos chinos. Becky Liu, jefa de estrategia macro de Standard Chartered Plc, ha señalado que el PBOC está intentando transmitir un mensaje claro al mercado sobre su nivel de "comodidad" con los rendimientos de los bonos. Sin embargo, existe un dilema claro para Pekín: debe encontrar un equilibrio entre el apoyo a la economía a través de tasas bajas y la prevención de la formación de burbujas en el mercado de bonos que puedan amenazar la estabilidad financiera. Las autoridades chinas parecen estar tomando lecciones del colapso del Silicon Valley Bank, que adquirió bonos del Tesoro estadounidense antes de que se produjeran aumentos en las tasas de interés. En este sentido, las medidas adoptadas por el gobierno buscan limitar el riesgo en las instituciones financieras, pero la eficacia de estas acciones a largo plazo todavía está en duda. Entre las diversas intervenciones, algunas firmas de corretaje han comenzado a restringir la negociación de bonos del Estado, siguiendo las directrices de los reguladores. Además, los grandes bancos estatales de China han sido instruidos a registrar los detalles de los compradores de bonos soberanos, lo que se interpreta como un intento de frenar la especulación en el mercado. Por otro lado, en Shanghái, la sucursal del Banco Popular de China ha convocado a ciertas instituciones financieras para discutir los riesgos asociados al mercado de bonos. Esta reunión refleja la creciente preocupación de los reguladores por los posibles efectos de un entorno de tasas de interés bajas en la estabilidad del sistema financiero. Los volúmenes de negociación de bonos a 10 años cayeron significativamente, alcanzando solo 58,000 millones de yuanes (aproximadamente 8,100 millones de dólares) en un día reciente, lo que representa solo el 48% de la media de la semana previa. Estas cifras son indicativas de una reacción del mercado ante las intervenciones regulatorias y el clima de incertidumbre que las rodea. A pesar de la reciente subida en los rendimientos de los bonos, analistas como el economista de Citigroup, Xiangrong Yu, han expresado dudas sobre si las medidas adoptadas por el PBOC serán suficientes para mantener un aumento sostenible en los rendimientos a largo plazo. Asegura que, en última instancia, los rendimientos de los bonos estarán determinados por los fundamentos económicos, y no solo por las intervenciones regulatorias. La deuda pública china ha ganado atractivo en el contexto de perspectivas económicas sombrías y la creciente demanda de inversiones financieras, lo que plantea preguntas sobre la efectividad de las actuales estrategias de control del gobierno.