Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Alianza Lima se encuentra en un momento crucial en la búsqueda de un nuevo director técnico que no solo logre revertir la crisis de resultados, sino que también esté alineado con los objetivos a corto y mediano plazo del club. La reciente salida de Alejandro Restrepo dejó un vacío que la directiva está intentando llenar con una elección cuidadosa, a pesar de la presión por obtener resultados inmediatos en el torneo Clausura. La situación se complica aún más tras la fallida negociación con Cristian Díaz, quien parecía ser el candidato ideal antes de que se cayera el acuerdo. Bruno Marioni, quien se encuentra a la cabeza del proceso de selección del nuevo entrenador, ha decidido que lo más prudente es tomarse un tiempo para evaluar todas las opciones antes de tomar una decisión final. Esto marca un cambio significativo en la estrategia del club, que inicialmente buscaba una rápida resolución. Marioni ha dejado claro que las características que busca en un nuevo técnico son fundamentales, empezando por un sólido conocimiento de la liga peruana y la capacidad para gestionar un equipo en la difícil altitud de Lima. En este contexto, han surgido tres nombres como principales candidatos para ocupar el puesto de director técnico. El primero en la lista es Pablo Bengoechea, un nombre que resuena con nostalgia en los corazones de los hinchas que recuerdan su exitoso paso por el club, donde logró consagrarse campeón en 2017. Sin embargo, a pesar de la buena relación que tiene con la hinchada, el perfil que se busca actualmente podría no coincidir completamente con el de Bengoechea, quien no es visto como la solución a largo plazo que el club necesita. Por otro lado, Mariano Soso ha tomado la delantera en las preferencias de la directiva. Su reciente experiencia dirigiendo en el fútbol brasileño con el Sport Recife le ha otorgado una perspectiva fresca y adaptada a un fútbol de alta competencia, lo que podría resultar beneficioso para Alianza. Soso no solo tiene un buen historial en el manejo de grupos, sino que también ha demostrado adaptabilidad y un conocimiento profundo del fútbol peruano, habiendo dirigido previamente a Sporting Cristal y Melgar. El tercer candidato, Pablo Peirano, ha quedado un poco relegado en la lista de prioridades. Aunque su paso por Cusco FC le ha permitido acumular experiencia en la liga, su perfil no ha generado el mismo entusiasmo que los dos entrenadores anteriores. Sin embargo, su nombre sigue en la conversación, aunque parece que no cuenta con el respaldo necesario para convertirse en la primera opción. La presión para tomar una decisión es intensa, especialmente con la competencia del Clausura avanzando y el equipo necesitando urgentemente una reestructuración en su dirección técnica. Marioni y la directiva saben que la elección del próximo entrenador podría ser decisiva no solo para el curso del torneo actual, sino también para la reconstrucción del equipo de cara a futuras competencias. El desafío no es solo encontrar un reemplazo para Restrepo, sino también establecer un proyecto a largo plazo que permita a Alianza Lima volver a ser un protagonista en el fútbol peruano. La afición, que ha vivido momentos de gloria y frustración, espera ansiosa que la directiva tome la decisión correcta. Y aunque el tiempo apremia, la prudencia en la elección del nuevo técnico podría ser la clave para evitar errores del pasado. Los próximos días serán cruciales para el futuro inmediato del club, ya que se espera que la directiva finalice su evaluación y elija al nuevo director técnico pronto. Alianza Lima necesita un líder que pueda no solo manejar la presión de un club grande, sino también inspirar a los jugadores a dar lo mejor de sí mismos en la cancha. Mientras tanto, la incertidumbre continúa en Matute, donde los hinchas se mantienen expectantes y esperanzados de que esta nueva etapa traiga consigo la redención que tanto anhelan. La historia del equipo está llena de desafíos, pero también de oportunidades, y la elección del nuevo entrenador podría ser el primer paso hacia un nuevo capítulo en esta rica tradición futbolística.