El primer ministro israelí Netanyahu está decidido a invadir la ciudad de Gaza, ignorando las preocupaciones de seguridad de 1.4 millones de civiles.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha confirmado planes para invadir la ciudad de Rafah en el sur de Gaza, a pesar de las preocupaciones por la seguridad de los 1,4 millones de civiles que residen allí. La comunidad internacional, incluyendo Estados Unidos, ha expresado alarma por las posibles consecuencias devastadoras de la invasión. Netanyahu afirma que se proporcionará un paso seguro para que los civiles puedan evacuar, pero la logística y la posible crisis humanitaria siguen siendo inciertas. Egipto se opone a la invasión, temiendo un flujo de palestinos desplazados y poniendo en peligro su tratado de paz con Israel. La situación sigue siendo altamente volátil y preocupante.
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El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha reafirmado su determinación de invadir la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, a pesar de las preocupaciones por la seguridad de los 1.4 millones de civiles que residen allí. En una entrevista con ABC News, Netanyahu declaró: "Vamos a hacerlo" y mencionó que se están desarrollando planes para el asalto. La comunidad internacional, incluyendo a Estados Unidos, el principal apoyo de Israel, ha expresado alarma por las posibles y devastadoras consecuencias de la invasión. La ciudad de Rafah ya está sujeta a frecuentes bombardeos aéreos y al menos 25 palestinos murieron en ataques nocturnos. Estados Unidos ha advertido contra la expansión del asalto terrestre en Rafah y las Naciones Unidas han advertido de una catástrofe humanitaria. Sin embargo, Netanyahu afirmó que se proporcionaría un paso seguro a los civiles para evacuar antes de que tenga lugar la invasión. La logística de reubicar a una gran cantidad de personas es incierta, ya que ya están confinadas en tiendas improvisadas cerca de la frontera con Egipto. Egipto se opone firmemente a la invasión, temiendo el flujo de palestinos desplazados hacia su península del Sinaí y la puesta en peligro de su tratado de paz con Israel. Hamas tiene extensos sistemas de túneles en la zona, algunos de los cuales cruzan hacia Egipto, lo que dificulta y prolonga la lucha contra ellos. La comunidad internacional, incluyendo la Unión Europea y líderes regionales, continúa emitiendo advertencias contra la invasión, citando el potencial de una crisis humanitaria y un aumento de la inestabilidad regional. La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) ha expresado una creciente ansiedad y pánico entre los residentes de Rafah. La situación sigue siendo altamente volátil, con el destino de la ciudad y sus civiles en juego.