La lucha por la educación en medio del caos y la destrucción en Gaza
En medio de los bombardeos y la destrucción en la Franja de Gaza, el profesor Tareq al Enabi ha ofrecido clases a niños en un refugio improvisado. Aunque los bombardeos han obligado a cancelar clases, Tareq cree en la importancia de que los estudiantes no dejen de aprender. La educación ha sido una de las principales víctimas del conflicto en Gaza, con más de 625.000 estudiantes privados de educación y más de 3.477 estudiantes y 203 miembros del personal educativo fallecidos. Además, más del 70% de los edificios escolares han sido dañados. Los estudiantes de la clase de Tareq sueñan con regresar a sus hogares y escuelas, pero pasarán mucho tiempo antes de que reciban una educación adecuada. Mientras tanto, Tareq se dedica a ayudar a las personas desplazadas en sus necesidades humanitarias y educativas.
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En medio de los bombardeos y la destrucción en la Franja de Gaza, el profesor palestino Tareq al Enabi ha decidido ofrecer clases a los niños en un aula improvisada dentro de un refugio en la ciudad de Rafah. A pesar de las circunstancias, Tareq cree en la importancia de que los estudiantes no dejen de aprender y se refugien en el aprendizaje del inglés. Sin embargo, los constantes bombardeos han obligado a cancelar clases en varias ocasiones. A pesar de todo, Tareq tiene la esperanza de que sus lecciones les ayuden a los estudiantes a expresar y transmitir sus sentimientos sobre la guerra.
La educación ha sido una de las principales víctimas del conflicto en Gaza, según informa el Ministerio de Educación de Gaza. Más de 625.000 estudiantes palestinos han sido privados de educación y más de 3.477 estudiantes y 203 miembros del personal educativo han perdido la vida durante los dos primeros meses de la guerra. Además, más del 70% de los edificios escolares en Gaza han sido dañados según el informe de Unicef. Esto ha llevado a la escasez de aulas seguras y a la falta de materiales de enseñanza y aprendizaje.
Los estudiantes de la clase improvisada de Tareq sueñan con regresar a sus hogares y escuelas, pero la realidad es que pasarán muchos meses, e incluso años, antes de que los niños de Gaza vuelvan a recibir una educación adecuada. Unicef estima que los desplazados internos tardarán años en poder evacuar las escuelas utilizadas como refugio y también llevará mucho tiempo reconstruir las escuelas dañadas. Mientras tanto, Tareq se dedica a ayudar a las personas desplazadas en sus necesidades humanitarias y educativas, pero se enfrenta a la difícil pregunta de cuándo terminará la guerra para que los niños puedan regresar a casa.