Hospital Shifa: un símbolo de sufrimiento en medio del conflicto de Gaza mientras miles se ven obligados a huir en medio de intensos disparos y falta de recursos.

En medio del conflicto en curso en Gaza, miles de personas han sido obligadas a huir del principal hospital, Shifa, debido a fuertes disparos y la falta de recursos básicos. El ejército israelí afirma haber proporcionado un corredor seguro para que las personas se desplacen hacia el sur, pero funcionarios de salud palestinos dentro del hospital contradicen esto, afirmando que el recinto está constantemente rodeado de fuertes disparos. La situación en Shifa es desesperada, con la Organización Mundial de la Salud informando que el hospital lleva tres días sin agua y ya no funciona como hospital. La difícil situación del hospital se ha convertido en un símbolo de la guerra más amplia entre Israel y Hamas. Los palestinos ven a Shifa como un lugar de sufrimiento, donde los médicos realizan cirugías sin anestesia y miles buscan refugio en sus pasillos. Israel acusa a Hamas de utilizar el hospital como centro de mando, pero Hamas y el personal del hospital niegan estas acusaciones. Actualmente, hay alrededor de 650 pacientes y personas gravemente heridas en Shifa, junto con aproximadamente 2,500 palestinos desplazados que buscan refugio. Los esfuerzos para evacuar a los pacientes restantes y a las personas desplazadas de Shifa se ven complicados por la falta de ambulancias y otros recursos. Varios hospitales y clínicas en Gaza se han visto obligados a cerrar, mientras que otros ya están al máximo de su capacidad. El Ministerio de Salud informa que tres bebés y otros cuatro pacientes han muerto debido a que el generador de emergencia del hospital se quedó sin combustible, y otros 36 bebés y pacientes están en riesgo porque no se puede alimentar el equipo médico vital. Mover a estos pacientes de manera segura y brindarles la atención que necesitan llevará tiempo y cooperación de todas las partes involucradas. La situación en Gaza continúa empeorando, con más de 11,000 palestinos y 1,200 israelíes muertos desde el inicio de la guerra. Estados Unidos ha llamado a pausas temporales en los combates para permitir la distribución de ayuda, pero Israel solo ha aceptado periodos cortos para que los civiles puedan huir. El conflicto no muestra signos de disminuir, dejando a la población de Gaza en una situación vulnerable y desesperada.